VERSTAPPEN: El holandés se ve perjudicado por la bandera amarilla al final: "Nada habría cambiado, la pole está demasiado lejos para nosotros".
Desastrosa clasificación para Max Verstappen en el Red Bull Ring. El campeón del mundo holandés se ve obligado a conformarse con la séptima posición de la parrilla.
Un resultado muy por debajo de las expectativas, aunque Max se quejaba continuamente, durante todo el transcurso de la clasificación, de que no tenía agarre ni en las curvas lentas ni en las rápidas, para un coche en general "inmanejable". El holandés también se ve obligado a intentar pasar el corte con neumáticos nuevos, algo inusual para él, en un fin de semana en el que la primera fila parece más lejana que nunca. La bandera amarilla al final, provocada por Pierre Gasly, le obligó a abortar la vuelta, pero para Max la diferencia aún habría sido demasiado grande para estar delante. Lo que sí es seguro es que frente a él, en la parrilla, estará su ex compañero de equipo Liam Lawson en Racing Bulls.
Verstappen: "Vuelta abortada, pero nada habría cambiado de todos modos"
"Hasta ahora este fin de semana no ha sido el más fácil. La FP3 de esta mañana ha sido más positiva que la clasificación, pero todavía estábamos lejos del ritmo adecuado y las condiciones más cálidas no nos han ayudado. El equilibrio del coche no era el adecuado y una vez que lo sientes en la pista, es poco lo que puedes hacer, y lo mismo ocurría con el agarre: era difícil saber si empujar o no. Pierre hizo un trompo, provocó una bandera amarilla y eso ciertamente no nos ayudó, porque tuve que abortar la vuelta. Incluso si lo hubiera completado, solo me habría llevado a la P3 o P4, todavía a cinco o seis décimas de la pole. Ese no es mi objetivo: quiero estar en la pole. No creo que sea fácil mañana, pero analizaremos todo después de la clasificación para tener la mejor oportunidad posible en la carrera".
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