"A Yuki le gustaría el podio en Japón, pero yo preferiría que Max se subiera a él", comentó el austriaco.
Yuki Tsunoda ya podría haber sido piloto de Red Bull Racing si no fuera por Adrian Newey. Así lo dijo el consultor del equipo de Milton Keynes, Helmut Marko. Con el despido de Liam Lawson después de solo dos carreras, el piloto japonés ascendió al primer equipo para reemplazarlo, junto a Max Verstappen quien, como sabemos, no estuvo de acuerdo con la elección hecha por el equipo austriaco.
"Él no estaba de acuerdo porque seguía diciendo que el auto es difícil de conducir. Esa es su opinión, y es algo bueno. Pero un equipo no puede ser campeón del mundo con un solo hombre", comentó Marko al Kleine Zeitung.
El consultor austriaco señaló que ascender a Lawson antes de Tsunoda fue un error, pero hubo un evento que se remonta al GP de México del año pasado, en el que la "fase decisiva" de quién debería haber reemplazado a Sergio Pérez, coincidió con un incidente en particular.
"Tsunoda chocó con el coche de Pierre Gasly y algunos de los coches en pista dañaron la parte inferior del coche de Verstappen, lo que le costó la carrera. Adrian Newey estaba furioso y, a partir de entonces, Yuki estuvo en su lista negra. Pero ahora Newey se ha ido, y Yuki ha estado trabajando él mismo. Cambió de dirección y simplemente creció. Le he oído decir que ya espera un podio en Japón, pero estaría contento si Max subiera al podio. Sin embargo, vamos a ver qué pasa".
Finalmente, Marko agregó que Red Bull no solo necesita un segundo piloto más competitivo, sino que el auto de 2025 debe ser más rápido en general.
"Necesitamos entregar rápidamente actualizaciones que realmente funcionen. Vienen en lotes, por supuesto, y si algo no funciona, tenemos que arreglarlo. Pero para ganar el quinto campeonato del mundo, estas mejoras deben ocurrir en las próximas cinco carreras. De lo contrario, será demasiado tarde.
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