Desde sus inicios, Sauber se mostró como un equipo de la zona media que puntuaba de vez en cuando. Sus primeras grandes actuaciones llegaron en su tercera temporada, un 1995 en el que empezaron a sumar puntos regularmente y consiguieron su primer podio gracias a un tercer puesto de Heinz-Harald Frentzen en el GP de Bélgica.

Con números más o menos parecidos durante las siguientes temporadas, el equipo suizo sí consiguió dar un salto de calidad en 2006 a raíz de su nueva asociación con BMW. Durante las cuatro temporadas que duro dicha asociación, Sauber consiguió sus mejores resultados deportivos, incluyendo 17 podios, su única victoria en la Fórmula 1 y un tercer puesto en constructores en 2008.

En 2010 Sauber volvió a las andadas y se quedó sin BMW, un golpe duro a todos los niveles que tuvo un claro impacto en sus resultados. Atrás quedó la época de los podios regulares, regresando a ser un equipo de zona media que cada año retrocedía un poco más por culpa de una crisis financiera que poco a poco ahogaba al equipo de Hinwil.

En 2018 y con la ayuda de Ferrari, Alfa Romeo llegó como principal patrocinador de Sauber y supuso un gran alivio para el equipo suizo. Solo un año después, en 2019, Alfa Romeo cogió más responsabilidades en el proyecto y renombró el equipo a Alfa Romeo Racing, nomenclatura con la que se ha mantenido el equipo hasta 2023, momento en el que ha finalizado un acuerdo imposible de renovar ya que Audi ha entrado en escena adquiriendo la estructura con la intención de entrar como fabricante para la temporada 2026.

2019 (8º, 57 puntos)

La estructura Sauber se reconvierte por completo. Ferrari da un paso adelante y en el acuerdo con el equipo suizo, que pasará a llamarse Alfa Romeo Racing por completo, con un mayor apoyo de Ferrari en lo que ya se consideraba equipo ‘b’ de Maranello en 2018.

Alfa Romeo además se hacía con los servicios de un campeón del mundo como era Kimi Raikkonen, que iría acompañado de Antonio Giovinazzi, con la esperanza de que diera tan buen resultado como el saliente Charles Leclerc.

La temporada empezó de forma positiva, especialmente en lo que a Kimi Raikkonen se refiere, que fue el único, junto a los pilotos de los tres mejores equipos, de puntuar en las cuatro primeras carreras del año, racha que recuperaría antes de verano, con el finlandés opositando a ser séptimo en la clasificación de pilotos a final de la temporada.

Sin embargo, las evoluciones en el equipo de Hinwil fueron escasas y no excesivamente fructíferas, por lo que cada carrera se hacía más complicado sumar puntos, además de lidiar con la inexperiencia de Giovinazzi, que tendía a desaprovechar buenas oportunidades.

Tras el parón veraniego, se vivió lo contrario que al principio de la temporada, pues Kimi Raikkonen apenas pudo puntuar en una sola carrera, en el Gran Premio de Brasil donde rozó el podio con un cuarto puesto, que seguido del quinto de Giovinazzi supuso el mejor resultado de la temporada.

Alfa Romeo cerró el año en octava posición con 57 puntos en su haber, en una temporada de más a menos en la que por momentos parecía que iba a ser capaz de competir contra Toro Rosso y Racing Point, pero en la que se tuvo que conformar con superar a Haas y Williams.

2018 (8º, 48 puntos)

Con la involucración de Ferrari, Sauber iniciaba una nueva etapa, un punto de inflexión tras varias temporadas de penurias. El equipo de Hinwil había recibido la inversión económica que necesitaba, los trabajadores se sentían confiados e incluso se empezó a invertir en capital humano, con importantes incorporaciones.

También llegaba un joven talento proveniente de Ferrari, Charles Leclerc, que acompañaría al ya veterano Marcus Ericsson. El Sauber C37 fue un coche que fue claramente de menos a más, al igual que sus pilotos, y si bien las primeras carreras al monoplaza parecía faltarle rendimiento, no tardaría en sacar a relucir todo su potencial.

Caso parecido al de Charles Leclerc, al que le costó varias pruebas puntuar, pero que cuando lo hizo, en Bakú, fue con un sexto lugar que Sauber no lograba desde 2015. El piloto monegasco fue el gran aliciente del equipo. Consiguió entrar en los puntos en cinco ocasiones en las siete últimas carreras, donde llamativamente, en cuatro de esas ocasiones, la posición final fue el séptimo puesto.

Esto permitió a Sauber sumar un total de 48 puntos, suficiente para superar a Toro Rosso y a Williams, perdiendo la batalla con la renombrada Force India por solo cuatro puntos, y en 14 con McLaren en la clasificación de constructores.

2017 (10º, 5 puntos)

Sauber sabía que 2017 iba a ser un año extremadamente complicado para ellos. Aun arrastrando los problemas económicos de 2016, el equipo suizo había cerrado un acuerdo con Ferrari para usar los motores de la pasada temporada, lo que prácticamente les condenaba en pista a ocupar las últimas posiciones. El equipo tenía claro que la prioridad era gastar poco y preparar a componer la nueva Sauber, la que vendría en 2018.

Para los pilotos, Sauber continuó confiando en Marcus Ericsson, que estaría acompañado por Pascal Wehrlein, piloto Mercedes que tras la desaparición de Manor se había quedado sin asiento, al no encontrar acomodo ni en Mercedes, por su inexperiencia, ni en Williams, por su juventud, ni en Force India, donde prefirieron a Ocon. Sin embargo, el alemán no pudo comenzar la temporada por una lesión de espalda, momento en el que fue sustituido por Antonio Giovinazzi, nuevo protegido de Ferrari.

En pista, los Sauber rodaban en tierra de nadie, incapaces de competir con cualquier otro constructor y teniendo a los potenciales fallos del resto como único camino para conseguir puntos. Puntos que llegaron en el Gran Premio de España gracias a una fantástica carrera de Pascal Wehrlein, que cruzaba línea de meta en octava posición. Poco más tarde, también el piloto alemán repetía éxito con una décima posición en el accidentado trazado de Bakú.

En ese camino a buscar una gran Sauber en 2018, Monisha Kaltenborn cerró un acuerdo con Honda, para convertirse en el segundo equipo suministrado por los japoneses tras McLaren. A la india le pareció lo mejor el contar con el apoyo de un fabricante para su nuevo proyecto.

Sin embargo, estas decisiones parecieron no gustar al grupo inversor, pues presentaba varios vacíos, y era potencialmente problemática en caso de McLaren, que debía suministrar varias piezas claves como la caja de cambios, decidiese romper su relación con Honda. Así pues, el grupo Longbow anunció en junio el despido de Monisha, el despido de la que había sido la primera mujer en convertirse en jefa de equipo en la Fórmula 1, y de igual manera, rompía su relación con Honda.

Para sustituirla, Sauber contrató a Frédéric Vasseur, quién había roto su relación con Renault al tener varios encontronazos con Cyril Abiteboul. Con Vasseur al frente, Sauber cerró acuerdos con Ferrari para contar con más apoyo del fabricante italiano, hasta el punto de que Alfa Romeo ganaría presencia para la próxima temporada, y los pilotos Ferrari rondarían los asientos del equipo, que ahora sí contaría con el último material disponible.

En los circuitos, la temporada acababa para Sauber sin volver a conseguir puntos desde Bakú, con solo cinco puntos en el casillero y con la esperada última posición en el mundial de constructores.

2016 (9º, 2 puntos)

Con la gran temporada 2012 todavía en la memoria y tras un 2015 positivo en el que se había superado el gran bache sin puntos de 2014, Sauber soñaba con dar un paso adelante con el que estar regularmente en los puntos. Queriendo borrar lo ocurrido en 2015 con Van der Garde, Sauber incluso evitó cambiar de pilotos, manteniendo a la pareja Marcus Ericsson – Felipe Nasr.

Desafortunadamente para los intereses del equipo suizo, el C35 estaba muy alejado en competitividad del resto de rivales y apenas podía mantenerse con regularidad por delante de los Manor. Las carreras se iban completando sin estar siquiera cerca de los puntos y comenzaron a surgir rumores de impagos y de empleados a los que se le adeudaban nóminas desde diciembre.

Monisha Kaltenborn junto a Peter Sauber encontraron la solución en el mes de julio tras vender su accionariado a un nuevo inversor que se hacía cargo de la parte económica del equipo, el grupo ‘Longbow Finance’, que también había sido uno de los grandes apoyos para que Ericsson llegase hasta la Fórmula 1. El grupo sueco se hizo cargo de los impagos y decidió seguir con la normal actividad del equipo, iniciando lo que sería un proyecto a medio plazo en el que el equipo buscaba recuperar la presencia de sus mejores años.

En pista, pocas cosas cambiaron y el equipo seguía sin acercarse a la zona de puntos, volviéndose la situación crítica tras el punto logrado por Pascal Wehrlein para Manor en Austria. La temporada iba llegando a su fin y todo apuntaba a que Sauber se iba a quedar fuera del top10 del mundial de constructores, perdiendo privilegios económicos.

Sin embargo, la buena suerte les sonrió en un alocado Gran Premio de Brasil, una carrera muy pasada por agua en la que Felipe Nasr logró cruzar línea de meta en novena posición, dándole al equipo los dos únicos puntos de la temporada y salvando entre comillas el honor de equipo, siendo la parte negativa, que, por otra parte, esto condenó prácticamente a la desaparición al equipo Manor.

2015 (8º, 36 puntos)

Las dificultades de Manor, un equipo que resucitaba de sus cenizas y de Honda, que volvía a la Fórmula 1 de la mano de McLaren, sirvieron para que Sauber terminara mucho mejor con respecto a la temporada anterior, en octavo lugar en el Campeonato de Constructores.

La llegada de un debutante como Felipe Nasr les vino bien a los de Hinwil, eso lo comprobaron, sobre todo, en Australia, carrera inaugural y en la que más recaudaron el brasileño y Marcus Ericsson. Un total de 14 puntos recopilaron entre los dos, ya que el rookie terminó quinto y el sueco, octavo. En China volvieron a acabar entre los diez primeros ambos y en Mónaco, Nasr fue noveno.

Hasta Hungría no regresaron a la zona de puntos, pero en las tres pruebas siguientes se mantuvieron en el top diez. Rusia también fue una cita buena para Nasr, pues finalizó sexto. Austin se le dio bien al rookie, ya que se hizo con dos puntos. Sin embargo, éste fue el último fin de semana en el que uno de los dos terminó entre los diez primeros, pues en los eventos restantes se fueron con las manos vacías.

Los de Monisha Kaltenborn le piden a 2016 establecer un techo presupuestario; que la FOM reparta el dinero de forma justa; reglas más simples y que se escuche más a los aficionados. De no mejorar la próxima campaña y si McLaren da el salto de rendimiento que esperan, los de Hinwil volvería a ser un equipo que luche en la parte de atrás de la parrilla, algo que, sin duda, no se pueden permitir tras haber mejorado tanto este año.

2014 (10º, sin puntos)

Una temporada nefasta para el equipo Sauber. Con una unidad de potencia como la de Ferrari, que no les resultó propicia en ningún momento y un monoplaza deficiente, la formación de Hinwill completó la peor campaña de su historia. No sumó ningún punto en carrera alguna y acabó siendo la penúltima clasificada en el Campeonato de Constructores.

Tras unas pruebas invernales en las que se mostraron medianamente fiables, Australia supuso la ocasión que más cerca se quedaron sus pilotos, Adrian Sutil y Esteban Gutiérrez, de lograr algún punto. De hecho, cruzaron la meta en 11º y 12 posición respectivamente. Pero a partir de ahí comenzó un viaje durísimo a lo largo de todas las pruebas del calendario.

La realización televisiva apenas se fijó en Sauber durante la temporada, salvo por algún que otro incidente en carrera, como los que protagonizó su piloto mexicano en Bahréin y Gran Bretaña, citas en las que tuvo dos toques bastante impresionantes con Pastor Maldonado. De hecho, en Sakhir, el coche de Gutiérrez acabó volcando completamente.

Con una undécima posición en Hungría como mejor resultado del Campeonato, de nuevo obra de Sutil, al equipo suizo no le quedó otra que esperar a que acabase un curso muy duro en todos los aspectos. De cara a 2015, su objetivo no será otro que el de mejorar, conociendo algo más de ante mano las características de la unidad de potencia de Ferrari y sabiendo los fallos que tuvo el C33 en la anterior campaña. También hay que tener en cuenta que la alineación de este equipo será completamente nueva, ya que los titulares serán el debutante Felipe Nasr y Marcus Ericsson, tras desvincularse de los bólidos verdes.

La tarea de volver a puntuar no será fácil, ya que su tesitura económica no es para nada holgada, siendo este conjunto uno de los que, junto a Lotus y Force India han demandado implantar un límite presupuestario a raíz de lo ocurrido con Caterham y Marussia y de sus propias situaciones.

2013 (7º, 53 puntos)

La temporada comenzó con muchos cambios en Sauber tras las salidas de Sergio Pérez rumbo a McLaren y de Kamui Kobayashi por falta de presupuesto. En su lugar, la escudería de Hinwil anunció la contratación de Nico Hulkenberg como primer piloto y, posteriormente, se confirmó la promoción de Esteban Gutiérrez al segundo volante titular proveniente de las GP2 Series. Por su parte, el piloto de pruebas anunciado fue el holandés Robin Frijns, campeón de la Fórmula Renault 3.5 de 2012.

Sauber tuvo un decepcionante debut en Australia, ya que Nico Hulkenberg no pudo salir a la carrera debido a un problema con el suministro de carburante y Esteban Gutiérrez terminó en un meritorio, pero insuficiente, 13º lugar en su debut.

La fortuna cambió en el GP de Malasia, donde Hulkenberg abrió el casillero de puntos del equipo tras finalizar en octava posición y sumar otro punto más en China, tercer evento del año. Las 4 siguientes pruebas fueron un calvario para el equipo sin poner a ninguno de sus hombres en los puntos, poniendo de manifiesto que el Sauber C32 estaba lejos de las prestaciones del C31.

Esteban Gutiérrez rozaba habitualmente las zonas cercanas a los puntos, quedándose a un par de posiciones de sumar por primera vez en la Fórmula 1 pero ese momento no llegó hasta Japón, 15ª prueba del año, que curiosamente fue la mejor del equipo con un sexto puesto de Hulkenberg y un séptimo de Gutiérrez, que ya no puntuaría más en la temporada.

Antes, aún en la primera parte del año, Hulkenberg logró otros dos puntos con sendas décimas posiciones en Silverstone y Nürburgring. Sin embargo, sería tras el parón veraniego cuando, coincidiendo con el cambio de neumáticos por parte de Pirelli, veríamos la mejor versión de Hulkenberg con cuatro carreras consecutivas puntuando (Italia, Singapur, Corea y Japón).

Habría que prestar especial atención a las pruebas en Italia y Corea porque fueron claves para el equipo. El tercer puesto en parrilla de Hulkenberg le sirvió para finalizar en un meritorio quinto puesto que daba un gran impulso al equipo, el cual sería rematado gracias a una mejora en el monoplaza que sirvió para que ambos pilotos entrasen en Q3 y Hulkenberg hiciese las delicias de los aficionados peleando y aguantando a Alonso y Hamilton para acabar cuarto, puesto que sirvió a Sauber para superar a Toro Rosso en la general de constructores.

Nico Hülkenberg volvió a puntuar en las dos últimas carreras y Sauber obtuvo el 7º puesto en el campeonato de constructores tras una gran segunda parte de año, aunque con un estancamiento considerable en relación a 2012.

El conjunto suizo ha sido de los que más ha sufrido económicamente hablabdo y en julio, Monisha Kaltenborn reconoció que el equipo atravesaba una difícil situación económica: El desarrollo del monoplaza estaba detenido y había retrasos en los pagos. Finalmente solucionaron la papeleta tras llegar a un acuerdo con un conglomerado de empresas rusas, entre las que se encontraba la del padre de Sergey Sirotkin, que se incorpora de inmediato al programa de desarrollo del equipo.

El ruso comenzó a prepararse para subirse al monoplaza como titular en 2014 y realiza distintos test y una exhibición en Sochi pero, finalmente, en Sauber se decantan por renovar a Esteban Gutiérrez y en contratar a Adrian Sutil tras la marcha de Nico Hulkenberg a Force India. El joven ruso, sin saltarse pasos, será el piloto probador del equipo durante la próxima temporada.

2012 (6º, 126 puntos)

Casi triplicar los puntos a final de campaña respecto a la temporada 2011 no fue un trabajo fácil, pero Sauber logró en 2012 mejorar la actuación del año anterior y perfilarse como una de las escuderías a tener en cuenta en el devenir de los Grandes Premios. Cuatro podios a lo largo del Mundial afianzaron sus opciones de luchar por la quinta plaza de la Clasificación de Constructores respecto a Mercedes pero las ocho carreras sin puntuar dañaron sus opciones y se quedaron a 16 puntos de las flechas plateadas.

Aunque avistaban la quinta posición en el Mundial, la formación de Hinwil no perdía detalle de lo que ocurría por detrás en la clasificación, con Force India marcándose el objetivo de batir a los suizos. Finalmente, Sauber mantuvo su posición y los indios no pudieron lograr los 17 puntos necesarios para subir un puesto en la tabla.

El C31 se mostró rápido en pista gracias, en parte, a las evoluciones introducidas en él a lo largo del año. Cabe destacar que la formación de Hinwil fue la primera en implementar los difusores con efecto Coanda, en las últimas jornadas de la pretemporada, que continuaron con tal novedad en 2012, y que inclusó copió gran parte de los equipos de la parrilla.

De la temporada, Sauber recordará los cuatro podios logrados en el Mundial, los primeros desde que la escudería suiza inició su andadura sin BMW. La segunda posición de Malasia de Sergio Pérez abrió las puertas de los buenos resultados y del gusto del champán de la escuadra capitaneada por Peter Sauber. Al puesto de Sepang le siguieron la tercera y segunda plaza del mexicano en Canadá e Italia, y el tercer cajón en Japón logrado por Kamui Kobayashi.

Más allá de los resultados y del comportamiento del equipo en pista, la escudería confirmó diferentes cambios internos tanto para 2013 como para la en ese momento vigente campaña. Peter Sauber nombró jefa de equipo a Monisha Kaltenborn ´tras confirmar su retirada de tal cargo, por lo que la que sería la primera jefa de equipo de la historia de la Fórmula 1 asumió las responsabilidades tras el anuncio en el Gran Premio de Corea. Además, Pérez y Kobayashi no continuarán en el equipo y la nueva alineación para 2013 la formarán Nico Hulkenberg y Esteban Gutiérrez.

2011 (7º, 44 puntos)

Temporada de progreso para Sauber, que dio un salto adelante más en relación a 2010. Aunque repitieron la séptima plaza y sumaron exactamente los mismos puntos que la campaña anterior, 44, la apariencia del trabajo obrado por Kamui Kobayashi y Sergio Pérez fue bastante más buena.

El C30 fue uno de los protagonistas de inicio de campaña. Tras un inicio decepcionante con una exclusión del GP de Australia, la cita inaugural, por una irregularidad en el alerón posterior, el equipo suizo retomó la senda para enfilar una racha de seis GPs consecutivos dentro del Top 10. Consolidados en séptimo lugar de la tabla de Constructores, las dudas llegaron a raíz del progreso de Toro Rosso hacia la mitad de la campaña, que puso en serio aprieto esta posición hasta el último GP. Sin embargo, la seguridad y aplomo de Kamui Kobayashi en las últimas dos citas aseguró tres puntos cruciales que valieron el séptimo puesto y una importante suma de dinero de cara a 2012.

Asegurada la continuidad de la escudería tras las dudas suscitadas en 2010, los deberes para Peter Sauber de cara a 2012 serían la mejora del progreso técnico del monoplaza durante la campaña, uno de los claros hándicaps del equipo. Claro que ello pasaría por lograr un pool de sponsors mayor...

2010 (8º, 44 puntos)

Tras la repentina marcha de BMW de la competición, Peter Sauber volvió a tomar las riendas del que fuera su equipo hasta 2006. Anunció que sus pilotos oficiales serían Pedro Martínez de la Rosa y el japonés Kamui Kobayashi, que impresionó con sus dos carreras disputadas en la temporada anterior. El coche sería el que BMW estaba diseñando para 2011 y sería impulsado por motores Ferrari. La temporada 2010 se prometía muy esperanzadora gracias a su gran rendimiento de pretemporada, que hacía soñar con volver a los mejores tiempos de BMW Sauber. Pero no fue así. El coche resultó ser mucho más lento y difícil de conducir de lo que los tiempos de pretemporada hacían ver y junto a los numerosos problemas de fiabilidad tanto del coche como del propulsor italiano únicamente lograron terminar una carrera cada piloto en las seis primeras carreras. En el GP de Turquía no finalizaron ambos coches: Kamui Kobayashi en la última posición que otorga puntos y Pedro en la undécima.

La falta de presupuesto del equipo suizo hizo que la evolución del coche fuera mínima. Estaban sólo por encima de los tres equipos debutantes. Pero mediada la temporada dieron un salto cualitativo considerable que permitió al equipo pasar con facilidad a la segunda ronda de clasificación y finalizar en zona de puntos o cercana. Tras el Gran Premio de Italia, se produjo una inexplicable decisión en el seno del equipo, prescindieron de los servicios de de la Rosa en favor de Nick Heidfeld a falta únicamente de 5 carreras para el final de la temporada. Heidfeld llevaba sin correr desde la temporada anterior. Finalmente, tras una temporada bastante discreta y más aún después de las expectativas puestas en pretemporada, el equipo finalizó en una decepcionante octava posición con 44 puntos.

Información

Peter Sauber primero entra en contacto con el mundo de la competición en 1967. En 1968 y 1969, participa en campeonatos nacionales y descubre su pasión por la cara técnica de la competición. En 1970 construye su primer coche de carreras: se llama el C1. Después de haber ganado los campeonatos suizos, Peter Sauber termina su carrera activa como piloto de competición.

Él se hace independiente y así se funda Sauber AG en Hinwil, con el objetivo de construir coches de carreras. Para mejorar el aspecto económico de la nueva compañía también proporcionan servicios para coches privados. En 1973, Peter Sauber participa en su última carrera como piloto y después se concentra totalmente en construir los coches de carreras. Produce los modelos de carreras Sauber de C1 a C8. En 1986, la compañía se mueve a Hinwil y venden el taller de coches privados para el que entonces trabajaba Alwin Kunzler.

En 1987, Peter Sauber construye sus coches de competición en las nuevas instalaciones. Los coches de carreras C9, C11 y C291 se construyen en los edificios nuevos y aquí es también donde los planes iniciales para el coche de carreras C12 de Fórmula 1 se traman. Al principio de 1992, la compañía se traslada a la fábrica de alta tecnología nuevamente construida en Hinwil (aproximadamente 6.500 m2). El C12 construido en 1993 es el primer coche de carreras de Fórmula 1 de Sauber que se construirá allí. En 1995, dos socios fuertes, Red Bull y Petronas ensamblan Sauber.

1996 es el año en que se funda la ingenieria AG de Sauber Petronas, empresa a riesgo compartido con la compañía petrolera de Malaysian Petronas. En 1998, Petronas comisiona la división de Powertrain Ingeniería AG de Sauber Petronas para construir su propio primer motor del alto rendimiento para los coches privados.

En 2001, ven una notable mejoría en el nivel de prestaciones del equipo. La entrada del joven finlandés Kimi Raikkonen y el cada vez mayor asentamiento de Nick Heidfeld en la categoría conducen al equipo al cuarto puesto final y a un 2002 en donde las expectativas son óptimas. La entrada para el 2002 de Felipe Massa será otro foco de interés, pues llega precedido de un prestigio notable.

Un 2002 en regresión fue lo que padeció Sauber en esta temporada. Los buenos presupuestos del inicio de campaña no se vieron trasladados a los resultados y el equipo suizo perdió una posición en el campeonato. Se vieron superados por Renault. Felipe Massa pecó de fogosidad y de inexperiencia aunque dejó su clase bien patente. Nick Heidfeld tampoco asombro ni pudo hacer que su 'caché' se elevara como con anterioridad lo había hecho Raikkonen dentro del equipo. Las ingentes inversiones en un nuevo túnel de viento se espera que den sus frutos en el futuro pero, por el momento, las novedades técnicas se limitan a una evolución de los conceptos ya expresados en 2001.

2003 fue un año particularmente difícil para Sauber. Ya no está en posición de pelear con los cuatro grandes y BAR parece estar construyendo sólidas bases, lo que dejaría a Sauber en el sexto puesto por mucho tiempo. Este año, el piloto más exitoso de la casa de Hinwil, Heinz Harald Frentzen, regresó al equipo que le vio debutar en 1994. La mejor actuación de la historia de Sauber se vivió en el Gran Premio de los Estados Unidos cuando Frentzen lideró un Gran Premio para su equipo por primera vez. El alemán finalizó en el último escalón del podio mientras Nick Heidfeld se adueñaba de la quinta posición, sumaba diez puntos para el casillero de Sauber y llegaba al Gran Premio de Japón en quinta posición. Acabaron el año en un sexto puesto. Ninguno de los dos pilotos continuará. Felipe Massa volverá al equipo y será el primer año de Giancarlo Fisichella en el equipo suizo.

La construcción de un túnel de viento propio del equipo suizo ha ayudado a que Sauber haya incorporado en 2004 algunas soluciones inéditas sobre todo a nivel de colocación de las masas radiantes. En el aspecto deportivo, hemos visto una notable mejoría en Felipe Massa que no ha podido, a pesar de ello, verse por delante de Fisichella. El equipo suizo montó en este año neumáticos Bridgestone que no dieron el mismo rendimiento que los montados sobre Ferrari. Así y todo, el equipo finalizó 14 veces en podio, con dos cuartos lugares (Canadá y Bélgica) como mejor resultado, situándose al final de la campaña en 6º lugar absoluto de la Clasificación de constructores.

Para 2005, el equipo suizo contó con los servicios de Jacques Villeneuve y Felipe Massa. La temporada comenzó con un ligero desequilibrio en cuanto a las prestaciones de estos dos pilotos. Villeneuve, que venía de estar casi un año parado, sufrió un poco para ganar credibilidad por los técnicos de Hinwil en lo que a sus reglajes respecta. Además, la ausencia de las pistas y su desconocimiento de los nuevos sistemas de ayuda para el pilotaje, hicieron necesario un largo periodo de adaptación.

Con ocho retiradas y tan sólo siete veces en los puntos, el equipo suizo no pudo pasar de la octava plaza en el Campeonato, únicamente por delante de los moribundos Jordan y Minardi. Sauber había abordado la construcción de un túnel de viento que había resultado muy oneroso y la dificultad añadida de adquirir los motores a Ferrari pusieron su situación en un punto límite. Bajo estas premisas, la propuesta de compra por BMW tuvo todo el beneplácito de Peter Sauber que se concretó con la venta del equipo al fabricante alemán. Como reconocimiento a su trayectoria, BMW acopló a su denominación el nombre de Sauber y en 2006 el equipo se llamará BMW-Sauber.