El ala trasera del equipo McLaren trabaja de una forma que en muchas ocasiones se ha señalado como ir en contra del espíritu de la norma.
Un afamado diseñador de F1 confesaba que le encantaba tomar el pelo a la gente, y que lo que hacía era, en parrilla de salida, colocar un muro de mecánicos como intentando tapar la parte trasera del vehículo… cuando en realidad las novedades se encontraban en la parte delantera. Esto hacía que el foco se dirigiese a la parte que en teoría se trataba de tapar en lugar de la verdaderamente interesante.
Desviar la atención
También lo afirmó Adrian Newey, en sus habituales paseos por la parrilla libreta en mano, cuando se quedaba mirando fijamente a una zona provocando que el rival intentara taparle la visión y así dejaba la zona que le interesaba libre para los fotógrafos.
Y aunque los tiempos cambian, es llamativo cómo parece que estas tendencias permanecen. Porque mientras rivales y FIA monitorizaban la flexibilidad de alerones delantero, con instalación de nuevas cámaras y pegatinas testigo, McLaren se desmarcaba con un alerón trasero que flecta de una forma que no se había visto hasta la fecha.
El caso es más llamativo si cabe si se tiene en cuenta lo mucho que se quejó McLaren en 2021 del alerón trasero de sus rivales, lo que acabó provocando que seis de los diez equipos de la parrilla tuvieran que modificar el ala una vez ya iniciada la temporada a pesar de pasar exitosamente las verificaciones técnicas.
Y las verificaciones técnicas es precisamente en lo que se escuda McLaren para defender su alerón. Todo es legal mientras pase las pruebas. Tan cierto como que se han prohibido multitud de elementos que, pese a pasar las pruebas, iban en contra del famoso espíritu de la norma.
Red Bull es el equipo que en la última década más ha sufrido esta persecución de alerones flexibles. Famosas fueron sus alas delanteras que se ponían prácticamente horizontales a máxima velocidad pero que a la hora de frenar recuperaban su forma para proporcionar más carga aerodinámica. Su trabajo con los materiales provocó que se endurecieran las verificaciones técnicas de forma continua, pero los ingenieros siempre encuentran la forma de traspasar los límites.
El espíritu de la norma
La incidencia del sol al atardecer en Bakú permitió apreciar de forma clara y diáfana en la cámara onboard cómo el ‘flap’ del alerón trasero del McLaren se eleva colocándose en una posición más vertical, reduciendo la resistencia al aire y aumentando la distancia máxima permitida entre ambos ‘flaps’. ¿Legal? Las pruebas las pasa. ¿Debería? No. No, porque ya se ha actuado en el pasado contra piezas que hacían este mismo efecto, tanto endureciéndose las pruebas como prohibiéndolas directamente por ir en contra del espíritu de la normal.
Hasta el momento, el alerón trasero de McLaren había pasado muy desapercibido, pero ahora está en el foco, así que queda ver cómo puede reaccionar la misma FIA que ya avisó que no modificaría la normativa de alerones delanteros antes de final de temporada.
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