El equipo alemán no está pasando por un buen momento en el mercado y las críticas sobre el proyecto van en aumento.
“Esto acerca a Volkswagen a la Fórmula 1” llegó a alcanzar la categoría de meme entre los aficionados más recurrentes de la categoría. Una noticia cíclica que señalaba al interés del gigante alemán en entrar en la élite del automovilismo, pero que nunca llegaba a concretarse.
Audi F1 llega con equipo propio para 2026
Y cuando menos se le esperaba, con una normativa con grandes barreras de entrada, sorprende Volkswagen y anuncia que Audi entra en Fórmula 1, tanto como motorista, como con su equipo propio, adquiriendo la estructura suiza, que asentada en Hinwil, está más cerca de sus instalaciones que las fábricas británicas.
Audi presentó su proyecto por todo lo alto. Inversión en infraestructuras, en capital humano y la ambición de entrar en esta selva de la forma más complicada posible; construyendo sus propias unidades de potencia desde cero. Las expectativas en los alemanes eran altas, porque ya fuera Le Mans, Dakar, o GT’s, han acabado triunfando allá donde lo habían intentado, quedándoles el reto más complicado, el de la F1.
Aunque desde entonces, también ha habido un conteo de noticias y rumorología negativa sobre el futuro del equipo que resulta de lo más curiosa. La más grande de todas, las de las discusiones de poder que desembocaron en el despido del hombre que había sido elegido para capitanear el proyecto; Andreas Seidl, venido directamente desde McLaren, y Oliver Hoffmann, un hombre de Audi. Crisis solventada con la incorporación final de Mattia Binotto.
Pero no ha acabado ahí la cosa, ya que el goteo de noticias que apuntan a un cambio de opinión en la cúpula directiva de Audi que acabaría con el cese en este proyecto de F1, ha sido también constante. Y es cierto que el grupo Volkswagen no está pasando por un momento boyante, al igual que el resto de la industria automotriz. La electrificación no está dando el resultado esperado, y la competencia asiática está obligando a replantearse muchos planes.
Situación económica compleja
Volkswagen ha puesto sobre la mesa un alto número de despidos y cierre de fábricas en lo que se creía que era el feudo intocable de la marca en Alemania. Y aquí es donde entra el equipo de F1, que muchos lo consideran un gasto superfluo, evitable, puro marketing.
Si Audi tuviera que tomar ahora mismo la decisión, parece que la respuesta sería clara, pero la decisión e inversión se tomó años atrás, y echarse atrás sería un auténtico despilfarro de dinero. No obstante, dada la situación actual, parece que la rumorología acompañará a Audi hasta el día que ponga su primer monoplaza en pista… o todo lo contrario.
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