Con el desarrollo del nuevo motor de F1 2026, Honda avanza según lo previsto, pero se centran primero en las partes eléctricas.
Aunque la temporada 2024 no ha hecho más que empezar, entre bastidores ya se está prestando mucha atención al esperado próximo cambio de era, que llegará en 2026.
Uno de los aspectos más intrigantes e importantes está sucediendo en las fábricas de los motoristas, que ya están trabajando duro en los motores de 2026. Mientras que los equipos no podrán empezar a trabajar en el reglamento del chasis hasta 2025.
El nuevo reglamento de las unidades de potencia estipula que el MGU-H desaparece, que el reparto entre la energía eléctrica y el motor de combustión interna pasa a ser aproximadamente del 50% y que el motor de combustión debe funcionar con combustible totalmente renovable.
Todos los fabricantes están por tanto en el punto de mira ahora mismo, con una lupa especial colocada sobre los hombros de Red Bull Powertrains al ser el recién llegado. Sin embargo, mientras que en Red Bull aseguran que todo va según lo previsto y que no hay motivo de preocupación, el actual socio del equipo austriaco unirá fuerzas con Aston Martin a partir de 2026.
Al igual que otros proveedores de motores, Honda no se queda de brazos cruzados. Los preparativos para 2026 también se están llevando a cabo a toda velocidad en Japón: "Hasta ahora, todo va según lo previsto. No podemos entrar en detalles, por supuesto, pero todo está en línea con nuestras propias expectativas", dijo el presidente de HRC, Koji Watanabe, durante una entrevista exclusiva con Motorsport.
Sin embargo, lo más destacado es que el enfoque de Honda parece diferir del de Red Bull Powertrains. Mientras que el proyecto de Red Bull apostaba inicialmente por hacer funcionar un motor de combustión interna completo -o un V6 real- en el banco de pruebas, Honda está apostando principalmente por los componentes eléctricos que tendrán mucha más importancia a partir de 2026.
"Nos estamos centrando principalmente en la parte eléctrica del motor, por lo que ahora nos centramos sobre todo en los componentes eléctricos y en la batería. Ese trabajo está totalmente en línea con los objetivos que teníamos. Paralelamente, por supuesto, también estamos trabajando con el motor de combustión interna, pero en esta fase todavía no es un V6, sigue siendo un monocilíndrico", dijo el japonés que dirige el proyecto de Honda en la F1.
Si bien los planteamientos de ambas marcas son diferentes, las dos situaciones tienen su explicación. Por un lado, Honda ya tiene experiencia con motores de F1, así que tiene todo el sentido del mundo empezar el desarrollo con las piezas que más importancia ganarán con el nuevo reglamento: los componentes eléctricos.
Después de todo, Honda ya sabe por su pasado reciente que puede desarrollar un motor de combustión interna sin problemas. Con Red Bull, la situación es completamente diferente, ya que la instalación de motores de Milton Keynes se construyó desde cero. En ese caso, a la hora de construir algo nuevo, lo lógico es empezar por la parte más "sencilla", es decir, el motor de combustión interna.
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