María de Villota, falleció mientras dormía el 11 de octubre de 2013, como consecuencia de las lesiones neurológicas derivadas de su accidente
El 11 de octubre de 2013 es un día marcado en negro para los aficionados al motor. Tal día como hoy hace 11 años nos despertamos con una noticia luctuosa: María de Villota había fallecido. Más de una década después de su despedida, su recuerdo sigue vivo y su legado es incuestionable. Todas las mujeres que empiezan en el automovilismo ven en María un espejo en el que mirarse, y cualquier ser humano la reconocerá por su apego a la vida.
El apellido De Villota es sinónimo de automovilismo. Emilio es un pionero de la Fórmula 1 en España, como piloto y posteriormente como fundador de una escuela de pilotos y un equipo de competición, además de editor-director de una publicación del motor. Su hija María también quería dejar su huella en el mundo del motor, y vaya si lo hizo.
Desde pequeña, la pasión de María por las cuatro ruedas era más que evidente. Una pasión que, además de con su padre, compartía con su hermano Emi. Algo que podía ser complicado, porque mientras todo el mundo daba por hecho que su hermano sería piloto como su padre, cuando María respondía que ella también, pocos la tomaban en serio. Además, las comparaciones entre ambos eran constantes.
Pero María siempre había tenido claro su objetivo: ser piloto de Fórmula 1. Ella quiso demostrar que era una piloto más, que podía llegar a la categoría reina y hacer historia. Luchó a contracorriente durante toda su carrera para conseguirlo. Un esfuerzo que se vio plasmado en marzo de 2012, cuando se convirtió en piloto probadora del equipo Marussia de Fórmula 1.
En julio de ese mismo año, la madrileña se subió a un Fórmula 1, pero la oportunidad por la que siempre había luchado terminó de la peor manera posible. Bajo la lluvia, María realizaba un test aerodinámico en el aeródromo de Duxford cuando se estrelló contra un camión situado a pie de pista que tenía desplegada una rampa elevadora a media altura, lo que causó que el accidente fuera de mayor gravedad. Estuvo a punto de fallecer, sufrió múltiples facturas craneales y perdió el ojo derecho como resultado del fuerte impacto. Aquí empezó la verdadera carrera de la vida de María.
El equipo se desentendió de todas las responsabilidades y aseguró que no había habido ningún fallo mecánico. Tiempo después se supo que no habían enseñado a María a parar el monoplaza correctamente, aunque la investigación exculpó a Marussia.
La recuperación no fue fácil, pero María consiguió salir adelante con la entereza que la caracterizaba. Debido a las lesiones, nunca podría volver a subirse a un monoplaza, pero lejos de resignarse porque el sueño de su vida se frustrase, María vivió plenamente la segunda oportunidad que el destino le dio. Se dedicó a realizar proyectos para sensibilizar sobre la seguridad en el automovilismo y se convirtió en embajadora de la Comisión de Mujeres de la FIA, donde siguió luchando para que las mujeres tuviesen el lugar que merecen.
Sin embargo, el 11 de octubre de 2013 llegó la peor de las noticias. María falleció mientras dormía como consecuencia de las lesiones neurológicas del accidente.
Ella estaba convencida de que la Fórmula 1 no era solo cuestión de hombres y puso todo su esfuerzo en demostrarlo y encontrar su sitio allí. Aunque desgraciadamente nunca llegó a cumplir completamente su objetivo, la española es mucho más que un referente dentro de la pista. María es un ejemplo de lucha y superación, de no rendirse, ya no sólo como deportista, sino también como persona. Ojalá todas las niñas que empiecen a practicar karting se parezcan un poco a ella.
Ahora, 11 años después de su fallecimiento, la Fórmula 1 sigue sin una mujer en su parrilla de salida. Sin embargo, afortunadamente, podemos afirmar que la situación es diferente a la que tuvo que hacer frente María en sus primeros años como piloto. Primero las W Series y ahora la F1 Academy han abierto las puertas a muchas pilotos, les han dado oportunidades que hace unos años no podrían haber imaginado. Y no sólo hay que hablar de categorías exclusivamente femeninas, porque las mujeres cada vez están presentes en más campeonatos. Se ve desde la base: 2023 fue un año récord en el Campeonato de España de Karting, pues fue el año con más presencia femenina, 14 pilotos que convirtieron el CEK en el campeonato no segregado con más mujeres pilotos del mundo. La Fórmula E también va abriendo camino y el próximo 7 de noviembre llevará a cabo la primera jornada de test exclusiva para mujeres, una gran oportunidad para las pilotos. Una gran oportunidad, pero que no es la primera de este tipo. En 2007 Campos Racing llevó a cabo un test para mujeres, en el que participaron seis pilotos, entre ellas María, en el Circuit Ricardo Tormo.
Todavía hay mucho camino por recorrer, no hay duda. Pero los avances de los últimos años son más que evidentes. ¿Qué diría María si viera cómo ha evolucionado el automovilismo? Seguro que estaría contenta por todo lo que se ha conseguido, pero, sin duda, seguiría trabajando al pie de cañón y seguiría luchando hasta ver como las mujeres llegan a la Fórmula 1 porque como ella decía, "el cronometro no entiende de sexos".
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