Los aficionados en Interlagos saltaron a la pista ante de lo permitido y los responsables del circuito han sido llamados por la FIA.
Los responsables del Autódromo Jose Carlos Pace han sido llamados a declarar ante los comisarios tras la finalización del Gran Premio. El motivo no es la primera vez que ocurre esta temporada: una invasión de la pista antes de lo permitido.
Los aficionados accedieron al circuito con coches aún en pista
La invasión a la pista es una práctica habitual al concluir la carrera, siendo el más destacado en Monza, donde los Tifosi salen a la recta principal para vestir el circuito de rojo Ferrari. Sin embargo, en el día de hoy se realizó de forma imprudente.
Instantes después de que Max Verstappen viese la bandera a cuadros y obtuviera su decimoséptima victoria de la temporada, los aficionados brasileños comenzaron a adentrarse en una pista que todavía estaba considerada "en directo".
Para prevenir este problema, los organizadores habían establecido una hora acordada en la que las puertas del Circuito se abrirían, permitiendo así a los aficionados entrar en el trazado y dirigirse a la recta principal para observar la ceremonia del podio.
Sin embargo, algunos fans saltaron las vallas que delimitaban el circuito antes de lo permitido, y, según se ha podido saber, los comisarios del circuito se vieron desbordados e incapaces de controlar la situación.
Aunque la pista aún estaba considerada "en directo", ningún monoplaza estaba ya en la pista, lo cual ha podido evitar que hubiera algún herido, pero no evitó que se generara preocupación en el mundo de la Fórmula 1.
Por esto, los comisarios han convocado a los responsables para que declaren y den explicaciones sobre lo ocurrido.
El precedente de lo ocurrido en Interlagos esta misma temporada
No hace falta retroceder mucho para encontrar un caso similar, ya que tuvo lugar uno este mismo año en el GP de Australia, la tercera cita del calendario.
Sin embargo, en aquella ocasión generó aún mayor preocupación, ya que los aficionados australianos presentes en el Circuito de Melbourne llegaron a adentrarse en el trazado cuando aún la carrera estaba en marcha.
En ese momento, la FIA determinó que "las medidas de seguridad y los protocolos que se esperaban para el evento no se aplicaron, lo que provocó un entorno inseguro para los espectadores, los pilotos y los oficiales de carrera". Los organizadores australianos se comprometieron a tomar las medidas necesarias para evitar que estos incidentes se repitan en 2024.
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